Comienza la danza de nombres

Como cada vez que culmina un campeonato ya comienzan a nombrarse posibles refuerzos para el futuro inmediato.

Entre los que hace más tiempo que se maneja con insistencia es el nombre de Diego Alonso, un jugador veterano que acompañó a Julio Ribas en su brillante campaña en Bella Vista, campaña que le llevaría por primera vez a Peñarol.

Este jugador tiene también un pasaje sin ningún peso en la vereda de enfrente y como recuerdo queda el clásico en el cual Paolo Montero lo anuló, borrándolo de la cancha para una goleada carbonera por 4 a 1. Ese día el tornado fue un vientito apenas, hoy llegaría en el declive de su carrera.

Otros nombres son los de Rodrígo Sebastián Vázquez otro jugador con pasado en nuestro rival de siempre y actualmente militando en Liverpool luego de un pasaje por Rusia y antes por Estudiantes de La Plata. Este es un volante mixto que puede colaborar en la marca y en ocasiones llega al gol, es el tipo de volantes del cual carece hoy Peñarol.

Raúl Ferro quedaría libre en Danubio y será un jugador que también interesa al técnico, en este caso debe ser el jugador más parecido a Arévalo Ríos que se pueda encontrar, tiene marca, empuje, es un tractor que no para en los noventa minutos.

Así están las cosas mientras se espera la definición del técnico acerca de los 18 contratos que están finalizando.