Peñarol es Solidario

El Decano concretó ayer su novena victoria consecutiva en el campeonato ante el juego enredado que propuso Rampla Juniors apañado por un impresentable R. Orfila que arbitró el partido con la carga a cuestas de la campaña que realiza el Dr. Toto y laderos en los medios de comunicación que trabajan oficialmente para el cuadro sin acta de fundación.
Peñarol lejos de esto es pueblo, es sentimiento, y ayer la gente demostró nuevamente ello al desplegar en todas las tribunas las alcancías que se llenaron en ayuda a Chile.
Demostró Peñarol una vez más lo que significa ser solidario y no aprovechar una desgracia ajena para promocionar la gran mentira de la "cultura" colocando un insulso "Arriba Chile" que no aporta NADA a los damnificados.
Peñarol es Solidario...los gurises de los distintos grupos, peñas, Los Enfermos, y muchos más ayudaron desde muy temprano en las tribunas para llevar adelante la propuesta de la donación "Elías Ricardo Figueroa".
Peñarol es Solidario...en la cancha todos corren y meten, si bien ayer el Decano no desplegó un gran futbol esto fue debido a un planteo con reiteración de faltas del segundo equipo del Cerro.
El árbitro apaña ello y se "guarda" las amarillas que solo a través de la presión de las tribunas se vió obligado a sacar, fácilmente hubo en ese primer tiempo dos faltas en el área de Rampla que podrían haber sido cobradas como penal con enormes agarrones sobre jugadores carboneros.
Así y todo llegó el gol de Peñarol en la hora del primer tiempo y a los 14 del segundo Gastón Ramírez colocó con gran cabezazo el 2-0 que debería haber dado tranquilidad.
Esta tranquilidad se convirtió en un ritmo lento que favoreció a Rampla y descontó y fué por el empate que al fin no se dió.
Los jugadores:
Sebastián Sosa: solucionó con grandes atajadas sobre la línea sus defectos al no contar centros.
Aguirregaray: no lució como otros partidos, igual ha levantado mucho en la parte física.
Alcoba: desordenado.
Guille Rodríguez: el mejor del fondo como en todo el campeonato.
Darío: buenas y malas
Arévalo Ríos: el motor, el alma, la entrega y el corazón.
Pato Sosa: muchas ganas y algo de juego.
Urretaviscaya: perdido en el mar de piernas y las faltas rivales.
Ramírez: el blanco de las patadas de todos los equipos contrarios, gran gol de cabeza.
Tony: entreverado pero siempre importante.
Martinuccio: siempre sensación de peligro, no se entendió su cambio.
El que ingresó:
D. Alonso: no era el cambio que el equipo precisaba.